Alumnado de 5º y 3º de Primaria
En este taller, los alumnos se dividieron en grupos de cuatro, y los miembros fueron
seleccionados por el tutor con el objetivo de tener una composición diversa en cada grupo.
Cada grupo incluía a un alumno considerado popular y prosocial, intercalado con otro alumno
de estatus rechazado y sin soporte social. Además, se asignó al alumno rechazado el papel de
portavoz y se le facilitó un papel protagonista gracias a su compañero líder.
La actividad se presentó como un juego en el que cada grupo debía pensar en una actuación
divertida y respetuosa que otro grupo realizaría. Se hizo hincapié en evitar ideas que pudieran
ridiculizar a los compañeros para evitar cualquier sentimiento de vergüenza. Sin embargo, se
reveló que en realidad serían ellos mismos quienes llevarían a cabo la actuación. Con este giro
en la actividad, se buscaba que los alumnos pudieran experimentar las emociones que estaban
destinadas a otros, fomentando así la empatía y la comprensión hacia los demás.